En un día como hoy hace 29 años atrás, el mundo me recibía a los golpes. Demasiado discreta como para empezar mi existencia a los gritos, el doctor que me trajo al mundo se vio obligado a “romperme el protocolo” para que yo diera señales de vida.

A partir de aquél momento aprendí que cuando te quedas inmóvil la vida te golpea, y desde entonces mi existencia que empezó de manera discreta fue marcada por un constante movimiento, inquietud, curiosidad, búsqueda…

Clarice Lispector escribió en su poema Cambia: “Sólo lo que está muerto no cambia”. Es un poco largo, pero si estás vivo, te va a gustar!

"Cambia, pero empieza despacio,
porque la dirección es más importante
que la velocidad.

Sienta en otra silla,
en el lado opuesto de la mesa.
Después, cambia la mesa.

Cuando salgas,
trata de caminar por el otro lado de la calle,
Después, cambia el trayecto,
camina por otras calles,
Tranquilamente,
Observando con atención,
Los lugares por donde pasas.

Toma otros colectivos.
Cambia por un tiempo tu estilo de ropa.
Regala tus zapatos viejos.
Trata de caminar descalzo algunos días.

Toma toda una tarde
para pasear libremente por la playa,
o por el parque,
y escuchar el canto de los pájaros.

Mira el mundo desde otras perspectivas.
abre y cierra los cajones
y las puertas con la mano izquierda.

Duerme del otro lado de la cama.
Luego, trata de dormir en otras camas.


Mira otros programas en la tele,
compra otro diarios...
lee otros libros,
Vive otros amores.

No hagas del hábito un estilo de vida.
Ama la novedad.
Duerme más tarde.
Duerme más temprano.

Aprende una palabra nueva cada día
en otro idioma.
Corrige tu postura.


Come un poco menos,
elije comidas distintas,
nuevos condimentos,
nuevos colores,
nuevas delicias.

Prueba lo nuevo cada día.
el nuevo costado,
el nuevo método,
el nuevo sabor,
la nueva manera,
el nuevo placer,
el nuevo amor,
la nueva vida.

Prueba.
Busca nuevos amigos.
Prueba nuevos amores.
Entabla nuevas relaciones.

Almuerza en otros locales,
frecuenta otros restaurantes,
toma otro tipo de bebida
compra pan en otra panadería.
Almuerza más temprano,
cena más tarde o viceversa.

Elige otro supermercado...
otra marca de jabón,
otra crema dental...
Báñate en nuevos horarios.

Usa biromes de otros colores.
Sal de paseo a otros lugares.

Ama mucho,
cada vez más,
de distintas maneras.

Cambia la cartera,
la billetera,
las valijas,
cambia el auto,
compra nuevos anteojos,
escribe otros poemas.

Tira los relojes viejos,
rompe delicadamente
estos horrendos despertadores.

Anda a otros cines,
otras peluquerías,
otros teatros,
visita nuevos museos.

Si no encuentras razones para ser libre,
inventa.
Se creativo.

Y aprovecha para hacer un viaje
despretensioso,
largo, si posible sin destino.

Prueba cosas nuevas.
Intercambia.
Cambia, nuevamente.
Experimenta otra vez.

Seguramente conoces cosas mejores
y cosas peores que las ya conocidas,
pero eso no es lo que importa.

Lo importante es el cambio,
el movimiento,
el dinamismo,
la energía.
Solo lo que está muerto no cambia!

Repito por pura alegría de vivir:
la salvación es por el riesgo, sin el cual la vida no
vale la pena!"